Y de repente tú...

Hoy necesitaba escribir. He tenido una mañana tan buena que me ha llevado a pensar...
Que de repente, llegaste tú...
¿Quién me iba a decir a mí que aparecerías en un lugar al que yo le tenía miedo? No veía futuro en aquel puesto de trabajo.
¿Quién me iba a decir que en dos horas me harías reír?
Me buscas.
Me encuentras.
Porque no puedo evitarlo.
Me gusta cuando me llamas y me encanta meterme contigo.
No puedo permitir que me veas flaquear.
Pero me tienes con solo mirarme.
Aunque te dé la espalda, mi cabeza te sigue pensando. Se muere de ganas de escuchar mi nombre en tus labios.
Me gustas.
Porque estás loco.
Porque tu sonrisa me enamora cada día.
Eres uno de los motivos por los que me levanto cada día y voy al trabajo.
Escucharte hablar en inglés con nuestra compañera.
Verte leer lo que escribo. Opinar sobre ello.
Me gusta ver cuando te pones serio y te centras en tu trabajo.
Y cuando me picas.
Saberte cerca me pone muy nerviosa, seguro que lo notas.
Pero no puedo decirte lo mucho que me atraes, lo que me encantaría que te acercaras a mí y me arrinconaras.
Hace dos años, cuando me cambiaron de puesto de trabajo, no imaginé que te cruzarías en mi camino.
Fuiste un bálsamo para mi mente.
Me pregunto que será de nosotros unos años después.
¿Y tú? ¿Qué piensas tú?

Comentarios

Unknown ha dicho que…
Ilusión, flechazo, pasión. Sigue, continua la historia. Quiero leer mas.

Entradas populares de este blog

Sin Nombre

MUERTE

Mi versión de Piratas del Caribe, el cofre del hombre muerto (Romántica)